miércoles, 20 de abril de 2011

Las estrellas que nos separan – Guillermo Vidal


—¡Perverso, voyerista, sádico!, te quedaste observándolos mientras morían, como un espectador impasible.
—¿Pero…?
—¿No te importó que no tuvieran salida, que miles de años de cultura y millones de evolución desaparecieran en un instante?
—No es seguro que…
—Cálculos fríos, es todo lo que fuiste capaz de hacer.
—Una nova era una oportunidad única. ¿Cómo saber si algún planeta estaba habitado?
—Lo imposible es que alguno no haya estado habitado, repetís hasta el cansancio, y te enfureces cuando no te creen.
—Pero amor, era una estrella a millones de años luz de distancia. ¿Qué podía hacer?
—Al menos derramar una lagrima ante tan enorme perdida. ¿Qué clase de insensibilidad es esa? ¡Quiero el divorcio!

Guillermo Vidal

No hay comentarios:

Publicar un comentario